Cuando todos los astros se apaguen en el cielo, cuando todos los pájaros paralicen el vuelo cansados de esperarte, ese día lejano yo te estaré esperando todavía.
José Angel Buesa

miércoles, 14 de abril de 2010

Me dueles...



No quiero acostumbrarme a tus palabras,
a tu mirada, a tus caricias contenidas
, a jugarme la vida en cada pensamiento.
No quiero acostumbrarme a las claúsulas de nuestras letras,
de echar de menos las noches sin encontrarte,
sin escucharte.
No quiero acostumbrarme
a una vida sin vos que nunca viví,
a esta infinita distancia.
Pero mientras no me olvides,
y aunque alguien te llame mi Amor,
esa palabra me pertenece
J. Quintana

domingo, 11 de abril de 2010

SONETO LXIX


Tal vez no ser es ser sin que tú seas,
sin que vayas cortando el mediodía
como una flor azul, sin que camines
más tarde por la niebla y los ladrillos,

sin esa luz que llevas en la mano
que tal vez otros no verán dorada,
que tal vez nadie supo que crecía
como el origen rojo de la rosa,

sin que seas, en fin, sin que vinieras
brusca, incitante, a conocer mi vida,
ráfaga de rosal, trigo del viento,

y desde entonces soy porque tú eres,
y desde entonces eres, soy y somos,
y por amor seré, serás, seremos.

Pablo Neruda

sábado, 10 de abril de 2010

Silencio




Cuando tú te quedes muda,
cuando yo me quede ciego,
nos quedarán las manos
y el silencio.

Cuando tú te pongas vieja,
cuando yo me ponga viejo,
nos quedarán los labios
y el silencio.

Cuando tú te quedes muerta,
cuando yo me quede muerto,
tendrán que enterrarnos juntos
y en silencio;

y cuando tú resucites,
cuando yo viva de nuevo,
nos volveremos a amar
en silencio;

y cuando todo se acabe
por siempre en el universo,
será un silencio de amor
el silencio.

Andrés Eloy Blanco

jueves, 8 de abril de 2010

Sin la Luna


Si repito tu nombre
después de otra jornada
y otra noche conmigo,
si tu olor me recorre
y entre pecho y guitarra
se hace más el vacío,

si estas manos entre acorde y acorde
acordándose van de tu pelo
no hace falta tanto cielo
si la luna de tu piel no está.

Si entre verso y respiro
se abre un azul profundo
que va tiñendo el tiempo,
si a contraluz te miro
y se hace más agudo
el filo de tu cuerpo,

si esta nota no alcanza a tu tono
y entonándote vuelo y respiro
no estoy solo, voy conmigo
y la estela de este canto atrás.

Puedo hablar de ti con mis amigos,
mi canto, mi silencio, mi conmigo,
puedo hallar tu rastro si lo quiero hoy
sé perfectamente donde te dejé.

Alejandro Filio

lunes, 5 de abril de 2010

Sin tu latido...



Hay algunos que dicen
que todos los caminos conducen a Roma
y es verdad porque el mío
me lleva cada noche al hueco que te nombra
y le hablo y le suelto
una sonrisa, una blasfemia y dos derrotas;
luego apago tus ojos
y duermo con tu nombre besando mi boca.
Ay, amor mío,
qué terriblemente absurdo
es estar vivo
sin el alma de tu cuerpo,
sin tu latido.
Que el final de esta historia,
enésima autobiografía de un fracaso,
no te sirva de ejemplo,
hay quien afirma que el amor es un milagro
que no hay mal que no cure
pero tampoco bien que te dure cien años;
eso casi lo salva,
lo malo son las noches que mojan mi mano.
Ay, amor mío...
Aunque todo ya es nada,
no sé por qué te escondes y huyes de mi encuentro.
Por saber de tu vida
no creo que vulnere ningún mandamiento;
tan terrible es el odio
que ni te atreves a mostrarme tu desprecio,
pero no me hagas caso,
lo que me pasa es que este mundo no lo entiendo.
Ay, amor mío...
Luis E. Aute

jueves, 1 de abril de 2010

No lamento tu ausencia...


No lamento tu ausencia, no me alegro tampoco:
Esta paz de tenerte como siempre en las manos
es parte de mi amor,
de este nuevo sentido que has puesto en mis sentidos.

Y no es que estés muy lejos
es que madura lento lo que más nos importa.
Y el tiempo y el espacio son frutas delicadas

Jesús Agudo

sábado, 27 de marzo de 2010

Invocacion...


Si el lenguaje
este modo austero
de convocarte
en medio de fríos rascacielos
y ciudades europeas
fuera
el modo
de hacer el amor entre sonidos
o el modo
de meterme entre tu pelo

Cristina Peri Rosi

(Uruguaya)

miércoles, 24 de marzo de 2010

Te acordarás..


Te acordarás

Te acordarás un día de aquel amante extraño
que te beso en la frente para no hacerte daño.

Aquel que iba en la sombra con la mano vacía,
porque te quiso tanto que no te lo decía.

Aquel amante loco que era como un amigo
y que se fue con otra para soñar contigo

Te acordarás un día de aquel extraño amante,
profesor de horas lentas, con alma de estudiante.

Aquel hombre lejano que volvió del olvido
solo para quererte como nadie ha querido.

Aquel que fue ceniza de todas las hogueras
y te cubrió de rosas sin que tu lo supieras.

Te acordarás un día del hombre indiferente
que en las tardes de lluvia te besaba en la frente,

Viajero silencioso de las noches de estío
que sembraba en la arena su corazón tardío.

Te acordarás un día de aquel hombre lejano,
del que más te ha querido porque te quiso en vano.

Quizás así de pronto te acordarás un día
de aquel hombre que a veces callaba y sonreía.

Tu rosal preferido se secará en el huerto
como para decirte que aquel hombre se ha muerto.

El andará en la sombra con su sonrisa triste
y únicamente entonces sabrás que lo quisiste.

José Angel Buesa

domingo, 21 de marzo de 2010

Me tienes en tus manos


Me tienes en tus manos
y me lees lo mismo que un libro.
Sabes lo que yo ignoro
y me dices las cosas que no me digo.
Me aprendo en ti más que en mi mismo.

Eres como un milagro de todas horas,
como un dolor sin sitio.
Si no fueras mujer fueras mi amigo.
A veces quiero hablarte de mujeres
que a un lado tuyo persigo.
Eres como el perdón
y yo soy como tu hijo.

¿Qué buenos ojos tienes cuando estás conmigo?
¡Qué distante te haces y qué ausente cuando a la soledad te sacrifico!
Dulce como tu nombre, como un higo,
me esperas en tu amor hasta que arribo.
Tú eres como mi casa, eres como mi muerte,
amor mío.

Jaime Sabines

jueves, 11 de marzo de 2010

Quisiera....



hacer un verso que tuviera
ritmo de Primavera;
que fuera
como una fina mariposa rara,
como una mariposa que volara
sobre tu vida, y cándida y ligera
revolara
sobre tu cuerpo cálido de cálida palmera
y al fin su vuelo absurdo reposara
--tal como en una roca azul de la pradera--
sobre la linda rosa de tu cara...

Quisiera
hacer un verso que tuviera
toda la fragancia de la Primavera
y que cual una mariposa rara
revolara
sobre tu vida, sobre tu cuerpo, sobre tu cara.


Nicolás Guillén.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Quiero hablar de tu amor, porque es el mío..




Quiero hablar de tu amor, porque es el mío:
decirme tu impaciencia y tu sorpresa,
tu soledad de mí que en mí no cesa,
tu sed que ignora el borde del hastío.

Quiero decir tu dulce desafío,
tu inseguro temblor y tu certeza,
tu júbilo que es casi una tristeza,
tu miedo indetenible como un río.

Quiero hablar de mi amor, porque es el tuyo:
porque estoy en el grito y el arrullo
-desesperado actor, mudo testigo-

porque soy quien se va pero regresa
para morder tu mano, mientras besa,
porque soy el que otorga. Y el mendigo.

Julia Prilutzky Farny