Cuando todos los astros se apaguen en el cielo, cuando todos los pájaros paralicen el vuelo cansados de esperarte, ese día lejano yo te estaré esperando todavía.
José Angel Buesa

sábado, 26 de diciembre de 2009

Fábricas de amor

Y construí tu rostro.
Con adivinaciones del amor, construía tu rostro
en los lejanos patios de la infancia.
Albañil con vergüenza,
yo me oculté del mundo para tallar tu imagen,
para darte la voz,
para poner dulzura en tu saliva.
Cuántas veces temblé
apenas si cubierto por la luz del verano
mientras te describía por mi sangre.
Pura mía,
estás hecha de cuántas estaciones
y tu gracia desciende como cuántos crepúsculos.
Cuántas de mis jornadas inventaron tus manos.
Qué infinito de besos contra la soledad
hunde tus pasos en el polvo.
Yo te oficié, te recité por los caminos,
escribí todos tus nombres al fondo de mi sombra,
te hice un sitio en mi lecho,
te amé, estela invisible, noche a noche.
Así fue que cantaron los silencios.
Años y años trabajé para hacerte
antes de oír un solo sonido de tu alma.

Juan Gelman



jueves, 17 de diciembre de 2009

Cómo decir de pronto....


Cómo decir de pronto:
tómame entre las manos,
no me dejes caer. Te necesito:
acepta este milagro,
tenemos que aprender a no asombrarnos
de habernos encontrado,
de que la vida pueda estar de pronto
en el silencio o la mirada.
Tenemos que aprender a ser felices,
a no extrañarnos de tener algo nuestro.
Tenemos que aprender a no temernos
y a no asustarnos
y a estar seguros
y a no causarnos daño.


Julia Prilutzky Farny

lunes, 14 de diciembre de 2009

Regálame....






Regálame la risa de tus ojos,
la tenue luz de tu sonrisa
y el milagro de tu nombre en mi boca.
Regálame la humedad de tus besos,
el tibio manto de tu abrazo
y el mar embravecido de tu cuerpo
junto al mio.


Regálame el amanecer de tus pasiones
el espejo frágil de tus lluvias
y tu inocencia hecha mujer
con mis caricias.
Regálame tu amor
amor y que venga la noche.

Carlos Enrique Ungo.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Ésa es tu pena


Tiene la forma de un cristal de nieve que no podría existir si no existieras
y el perfume del viento que acarició el plumaje de los amaneceres que no vuelven.
Colócala a la altura de tus ojos
y mira cómo irradia con un fulgor azul de fondo de leyenda,o rojizo, como vitral de insomnio ensangrentado por el adiós de los amantes,
o dorado, semejante a un letárgico brebaje que sorbieron los ángeles.
Si observas a trasluz verás pasar el mundo rodando en una lágrima.
Al respirar exhala la preciosa nostalgia que te envuelve,un vaho entretejido de perdón y lamentos que te convierte en reina del reverso del cielo.
Cuando la soplas crece como si devorara la íntima sustancia de una llama y se retrae como ciertas flores si la roza cualquier sombra extranjera.
No la dejes caer ni la sometas al hambre y al veneno;sólo conseguirías la multiplicación,
un erial, la bastarda maleza en vez de olvido.
Porque tu pena es única, indeleble y tiñe de imposible cuanto miras.
No hallarás otra igual, aunque te internes bajo un sol cruel entre columnas rotas,aunque te asuma el mármol a las puertas de un nuevo paraíso prometido.
No permitas entonces que a solas la disuelva la costumbre,no la gastes con nadie.
Apriétala contra tu corazón igual que a una reliquia salvada del naufragio:
sepúltala en tu pecho hasta el final,hasta la empuñadura.

Olga Orozco

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Rendición de cuentas....



Te debo una lágrima.
Me debés una ternura
o dicho en otras palabras:
Nos debemos ese imprescindible
instante
de absoluta sinceridad
Cristina Fornés

domingo, 6 de diciembre de 2009

Corazón coraza


Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche
está de ojos abiertos
porque la noche pasa
y digo amor
porque has venido
a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda
desde el pie hasta el alma
porque eres buena
desde el alma a mí
porque te escondes
dulce en el orgullo
pequeña y dulce corazón coraza
porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro
y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro
porque tú siempre
existes donde quiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida
duela como dos
aunque te busque
y no te encuentre
y aunque la noche pase
y yo te tenga y no.


Mario Benedetti